La legislación sobre máquinas y equipos de
trabajo es amplia y en ocasiones compleja. En muchos casos, no será necesario
conocer exhaustivamente todo el entramado normativo. Lo verdaderamente importante
es asegurarte de cumplir con las obligaciones que se derivan
de dicha normativa de manera que la protección del trabajador esté garantizada.
Para ello, ¿qué debes saber y qué debes
hacer?
- Fíjate si la
máquina o el equipo dispone de marcado “CE” o declaración de conformidad, donde
el fabricante declara que la máquina o equipo comercializado satisface todos
los requisitos esenciales de seguridad y salud correspondientes. Las maquinas
deben ser intrínsecamente seguras, deben haber sido fabricadas, revisadas y
mantenidas de acuerdo a los reglamentos y directivas que le sean de aplicación
- Recuerda que si no
lo lleva puede ser porque se compró antes de 1995. En este caso, deberá tener
una evaluación específica que indique que cumple con la normativa.
- La evaluación de
riesgos de cada puesto debe contemplar los riesgos derivados de la utilización
de maquinas y equipos para todos y cada uno de los usos previstos: puesta en
marcha, mantenimiento o limpieza. Estos han de ser adecuados al trabajo que
debe realizarse y convenientemente adaptados al efecto.
- Debe ponerse a
disposición de los trabajadores un manual de instrucciones comprensible de
acuerdo a las especificaciones del fabricante. La organización debe asegurarse de
que máquinas y equipos se usan para lo que han sido diseñados y de acuerdo a lo
establecido en el manual.
- Si la máquina o
equipo ha sufrido modificaciones o alteraciones de manera sustancial sobre el
funcionamiento previsto, debe disponerse de un nuevo expediente técnico, otro
manual de instrucciones y la declaración de conformidad o evaluación.
- Los trabajadores
que utilicen la máquina deben recibir información y formación específica suficiente
para realizar su tarea de forma segura. La aptitud para realizar un trabajo de
forma segura varia con las personas, pero incluso aquellas que parecen más
hábiles pueden, cuando dejan de actuar de forma normal, sufrir un accidente. Es
necesaria una formación en aspectos tanto teóricos como prácticos, sobre
métodos seguros con máquinas que capacite para identificar situaciones de
riesgo, seleccionando las medidas de prevención más adecuadas y que permitan proponer medidas de prevención adicionales.
- Se debe realizar un
mantenimiento preventivo de las máquinas y equipos en base al manual de
instrucciones. Estas tareas serán realizadas por trabajadores específicamente
capacitados.
- Los dispositivos de
seguridad deben estar señalizados. Los dispositivos de parada de emergencia
deben ser de fácil acceso, teniendo en cuenta los datos antropométricos, biomecánicos
y la posible presencia de personas entre dispositivos de protección.
- La protección debe
alcanzar no sólo al operador sino a cualquier persona situada en las
inmediaciones. La zona de trabajo alrededor de la máquina debe estar despejada,
limpia y libre de obstáculos; incluyendo la necesidad de espacios de seguridad
adicionales. Desde el puesto de mando el operador pueda asegurarse que no hay
personas expuestas en zonas peligrosas.
- La puesta en marcha
debe poder efectuar solamente mediante una acción voluntaria, incluso tras una
parada de la misma.
- Los trabajadores
deben disponer de los EPI necesarios para trabajar con la máquina o el equipo. Para
la selección correcta de EPI, se debe tener en cuenta el entorno en que se situé
la máquina y lo indicado en el manual de instrucciones.
- Debe asegurarse que
el trabajador está protegido de otros riesgos que se derivan del uso de la máquina
o el equipo, como ruido, polvo, contacto con sustancias químicas, posibilidad
de rotura, proyecciones, etc.
- Los resguardos
deben, en la medida de lo posible, construirse con materiales que permitan
retener posibles proyecciones. Los resguardos fijos deben estar colocados
correctamente.